
Para la elaboración de este instrumento se requieren láminas de madera de ceiba, procesadas preferiblemente, debido a que esta madera es mucho más fuerte y de mejor calidad que cualquier otra. El instrumento en cuestión está compuesto por tres partes; la caja de resonancia, la consola o diapasón y la columna.
La caja de resonancia es la pieza principal o cuerpo del arpa; se construye ensamblando cinco láminas o chapas de madera de forma triangular. La consola está constituida por una pieza maciza de madera en forma de arco curveado, cuyo acabado es oscuro para hacerla destacar, y está provista de clavijas y cejillas para tensar y afinar las cuerdas. Pieza va adosada a las partes superiores de la columna y de la caja de resonancia. La columna es el tubo de madera sólida y torneada que se apoya en la parte inferior de la caja de resonancia y que le brinda apoyo y estabilidad a la consola.
Luego de estar armado el instrumento se inicia el proceso de acabado y pulido. Por último, las 32 cuerdas que han sido amarradas al cuerpo del arpa se tensan y se atan a las clavijas y cejillas ubicadas en la consola.
Pedro Barreto desde hace quince años siempre tiene dos arpas en exhibición, una para la venta y otra de su colección. Muchas personas aprecian el trabajo de este hombre, cuya característica primordial es la belleza y calidad.
Instituto de Patrimonio Cultural