jueves, 25 de mayo de 2006

Y el Burro ???

Por alla en 1910, estaba yo muchacho y vivia por Corralito, cerca de Quisiro. Un día me dice mi mamá que ya no habia comida.

Me tocaba ir a cazar. Salgo bien temprano en la mañana en mi burro a ver que consigo. Paso el dia entre tunas y cujies y nada, no vi ni un conejito.

Ya en la noche, me quede a dormir en el monte. No habia comido.

Al otro dia, sigo en mi búsqueda y en la tarde, nada.

Vuelvo a pasar otra noche en el monte, y sin comer.

Al siguiente dia, me di cuenta de que habia avanzado mucho. Ya no habia cardones ni cujies, sino árboles grandes. De repente, veo un mata grandisima de mamón.

Amarro el burro debajo de la mata, y me subo. Empece a comer mamones y a tirar la cáscara hacia abajo. Estaban dulcitos, con el buen sabor que le da un hambre de dos dias.

Cuando me harté de mamones, baje de la mata, y no veo a mi burro. "Coño, se fue el condenado" me dije. Lo empece a maldecir y en eso, un movimiento en un gran montículo a mi lado.

El burro estaba alli, solo que lo habian tapado las cáscaras de los mamones que me comí.

"Papabuelo"

El sueño de Amadis

Una vez nos fuimos Amadis (mi yerno) y yo a la Feria de Corralito, en 1968. Y salimos de regreso para Cabimas como a las 3 de la madrugada, con más palos encima que una caja de fósforos, y mucho sueño.

Veniamos en la camioneta y yo venia pendiente de que Amadis no se durmiera.
Hay que saber que ese lugar es como un desierto con puras tunas y cardones, de vez en cuando un cují. No habia carretera. Sólo las huellas de otros vehículos. Por alli te guiabas.

Amadis cabeceaba mucho. Cada rato yo le decia: "Amadis!!, te vas a salir de la trilla!!", y el pelabas los ojos y retomaba el camino.

En eso pasamos cerca de un rio que tenia un pozo profundo, y le digo a mi yerno:

"Amadis, pará. Vamos a echarnos agua para despertarnos. Vos venis mal." y paramos a la orilla del pozo.

Dejamos las luces de la camioneta encendidas ya que estaba muy oscuro. Nos acercamos al agua y Amadis se agacha para lavarse.

En eso se resbala y se cae al agua. Yo lo dejo, para que el agua fria lo despierte, pero veo que no sale.
"Amadis !", comienzo a gritar. "Amadis!!!". Me deje de tonterias y me lance al agua.

Y ustedes se preguntaran: "Y como lo encontro, en ese pozo profundo y oscuro?"

Muy fácil. Por los ronquidos. Estaba durmiendo en el fondo. De alli lo saque y me lo traje.

Maneje yo el resto de la noche.

"Papabuelo"

Algo brilla en el Lago...

Una vez, por 1945, estaba sentado en el muelle, de donde salian las Naveca, pescando. A lo lejos, en el Lago, veo flotando algo que brilla. Yo seguía pescando y me preguntaba: "Que será eso?".

Poco a poco, las olas fueron trayendo el objeto que flotaba hasta la orilla. Cuando ya lo tenia bien cerca, me tire al agua que me llegaba a la cintura y agarro el objeto. Era pesado. Muy pesado, pero logre sacarlo al muelle.

Esa es la historia de como obtuve mi primera "Mandarria".

"Papabuelo"