sábado, 10 de noviembre de 2012

Museo de arte popular Rafael Vargas

El Museo de Arte Popular y Tradiciones  Rafael Vargas es un ejemplo de la Venezuela posible cuando se le dan metas claras y reglas de juegos definidos, para la defensa y proyección de la cultura popular porque sin cultura no se llega a ninguna meta. El 28 de marzo de 1982 se funda el Museo de Arte Popular y Tradiciones  Rafael Vargas por iniciativa de la Dra. Flor Romero. El Museo lleva el nombre del insigne tallista y pintor falconiano que estuvo residenciado en Cabimas por muchos años, quien dejó una vasta obra y pionero del arte popular en Cabimas. Estuvo ubicado en la calle Bolívar de Cabimas, antigua sede “Obreros del Bien”.

El Museo sigue constituyendo el centro de retención de la memoria colectiva de una comunidad con un proceso creador que ha participado en la configuración de un ámbito social cruzado por la imposición de valores económicos ajenos que reelaboran su pasado de caserio agro-pesquero empujándolo violentamente a una dinámica de campamento petrolero que si bien conformaron un nuevo aparato productivo minimizaron el saber popular. Por lo tanto, se debe consolidar que se vincule en una nueva concepción museística como centro educativo hacia la comunidad, recibiendo de ella su saber. Actualmente funciona en la Dirección de Cultura de Cabimas.

La muestra constituida por obras de hombres y mujeres sellan con sus manos su vivencia, recogida en las pinturas y esculturas de: Elsie de Arratia, Marcelo Bermúdez, Rafael Chirinos, Emerio Dario Lunar, Blanco Aparicio, Petra de Martínez, Pedro Oporto, Luis Sánchez, Margarita Soto, Antonio José Fernández, Rafael Navarro, Homero Nava, Nabor Terán y Rafael Vargas.

Posee una extraordinaria colección de arte popular, entre los cuales tenemos: La Machúa, Calle del Comercio, Adán y Eva, Muñena de Silla de Cardón, Las 15 Letras, San Benito Obrero, Homenaje a Aquiles, Atril Tallado en Madera, Mesa Tallada en Madera, Mujeres con Flores, Casa del Empedrado, Pregonero, Madre Nega, Madre con Niños, Animales, El Pavo I, El Pavo II, Sarita Montiel, Cabimas Antañona.

Para finalizar, el Museo Rafael Vargas requiere una sede para continuar su labor de difusión y ajustarse a los nuevos cambios de transformación social que vive el país.

Sotero Pino Roque

soteropino@cantv.net 

domingo, 28 de octubre de 2012

Serapio Agreda: un luchador por su comunidad

Es probable, que el nombre de Serapio Agreda, no signifique o represente nada para muchas personas de las nuevas generaciones de mi comunidad, que no lo conocieron o que nunca escucharon una palabra de él, pero si para los viejos habitantes de este barrio que lo recuerdan por haber emprendido obras de mucho valor e importancia en beneficio de los pobladores de esta comunidad.

Serapio, a quién veíamos transitar por las calles en su bicicleta, era un margariteño que llegó a estas tierras de Cabimas en los años 30, en la búsqueda de mejores condiciones de vida, residenciándose en mi barrio, hasta que logró ingresar a la empresa petrolera Lago.

Tengo que expresar, que a él le debo parte de mi educación, cuando me inscribió en la escuela “Concordia”, hoy “Pedro J. Maninat” en 1938, como hijo de él, permaneciendo en ella hasta el año 1941, cuando egresé de 4º grado.

El era una persona muy cordial, afable y con un sentido de la amistad muy arraigado, que le permitió ganarse el afecto y aprecio de los pobladores de esta región, por su sentido humanitario y el empeño por favorecer a sus semejantes.

En este barrio de la Montañita se casó con Mercedes, una paisana y procreó cuatro hijos: Eridano, Arsenio, Serapio, y el negro que siempre lo acompañaban en sus actividades políticas de su partido A.D. en el cual militaban.

Durante el transcurso de esos años Serapio, el incansable luchador, conociendo la necesidad de una institución de salud en la comunidad, inicia la campaña para que se dote a ese barrio de un dispensario, el cual se logra al construirlo en la vía principal en 1950, siendo el primero que se establece en la ciudad y se asigna como director al Dr. Alfonso Reinoso, persona de una gran sensibilidad social, quien atendió con mucha dedicación el cargo, en lo referente a emergencia, cirugías y los pacientes normales, durante las 24 horas.

Posteriormente, este dispensario fue cerrado al construir un módulo de servicio que incluía ambulatorio, laboratorio, programa PAMI y canchas deportivas.

Luego del dispensario, Serapio en colaboración con otros habitantes, promovió una institución dedicada a favorecer a las personas en situación precaria, para favorecerlas en casos mortuorios, suministrándoles el ataúd y algunos gastos funerarios.

Esta nueva institución, tuvo una duración precaria, pero muchos fueron los favorecidos por esta iniciativa de nuestro recordado amigo Serapio, a quién los habitantes que conocieron de su preocupación no pueden olvidarlo.


Pedro Ramón Estrada 
Cronista de Cabimas 
El Regional del Zulia 27/10/2012

jueves, 4 de octubre de 2012

EL ESTADIO DE CABIMAS


Después que se inicio la explotación petrolera y en el transcurso de pocos años se desarrollo en Cabimas una gran afición por los deportes. 

Cabimas llego a tener mucha actividad en el campo deportivo y las compañías petroleras tenían dentro de su personal a muchas personas destacadas en diversos deportes. Con mucha frecuencia se presentaban encuentros deportivos de atletismo, softball, beisbol, ciclismo, etc, no solo en el campo local, sino distrital, regional y nacionalmente. Pero para el desarrollo de los encuentros de beisbol, específicamente,  no existía una infraestructura que se pudiese decir que llenaba todos los requisitos para ser un buen estadio. Si bien cumplían algunas normas a cabalidad se quedaban muy lejos de poder cumplirlas todas o la mayoría de ellas. 


     Los estadios existentes para el año 1954, el estadio Francisco Gutiérrez en La Rosa, el Venoil en las 40, el de Miraflores en el campo Miraflores, el Concordia en el campo Concordia, el de la Montañita en el sector la Montañita, etc, cumplían a duras penas con las dimensiones del terreno y su respectiva cerca, los dogouts algunas veces improvisados y una pequeña tribuna para los aficionados era la norma. Carecían de  otros elementos necesarios para la comodidad y desplazamiento de los visitantes, de periodistas y autoridades deportivas, como vestuarios, sanitarios, palco de prensa, etc. Todavía pueden verse en estos estadios esa característica de construcción pues no han cambiado mucho con el tiempo. 

     A raíz de esta situación, todas las organizaciones que tenían que ver con la actividad beisbolera y público en general  empezaron a plantearles a las diferentes asociaciones deportivas existentes la necesidad apremiante que existía para construir un estadio nuevo, moderno, que estuviera a la par de otros estadios de otros estados o países. 



Este nuevo estadio de Cabimas que se construyo en el sector “Las 40” fue de un gran avance en su momento, se le incorporaron algunas mejoras que no tenían los estadios existentes en el Distrito Bolívar para esa fecha. Le construyeron amplios dogouts, locales para oficinas administrativas, cantina, salón para los árbitros, sanitarios para los aficionados, palco de la prensa, pizarra para las anotaciones, taquillas para la venta de entradas, torres para alumbrado, etc. Pero lo más resaltante fue que al estadio se le levanto una cerca de bloques en todo su perímetro, lo cual lo aislaba por completo del resto de la ciudad, de manera que la persona que quiera ver algún espectáculo que se esté presentando tenga necesariamente que pagar una entrada. De todos es sabido que en el campo profesional los jugadores devengan un salario y el aficionado con el pago de su entrada contribuye a que se realice ese pago. 



Se presentaron varias discusiones para determinar cuál sería el nombre a ponerle al estadio, surgieron nombres de políticos, de héroes nacionales, de deportistas, etc, sabiendo que este iba a ser el mejor estadio con el que iba a contar el Distrito Bolívar y que estaba ubicado en la ciudad que tenia la mayor cantidad de habitantes para ese momento. No prosperaron las propuestas planteadas y se selecciono como nombre: Estadio Cabimas.

Llego el día esperado y  el  9 de Diciembre de 1954, en la tarde de ese día se procedió a cumplir con un programa determinado para inaugurar  brillantemente el moderno Estadio Cabimas con la asistencia de distinguidas personalidades y una numerosa concurrencia que pleno por completo todas las localidades. Estuvieron presentes como autoridades deportivas y del Gobierno El Teniente Coronel Franz Risquez Iribarren, Director del Instituto Nacional de Deportes; Dr. Gastón Montiel Villasmil, Secretario General de Gobierno del Estado Zulia; Dr. Pedro Elías Belisario Aponte, Presidente de la comisión Regional del IND; Mayor Carlos Rafael Camacho Paz, Presidente de la Junta Administradora del Estadio Cabimas; el Teniente ® Pico Pérez Presidente del Comité Pro-Estadio y Prefecto del Distrito Bolívar y otras personalidades invitadas al evento.

Se comenzó el acto izando la Bandera Nacional y seguidamente la bandera del Instituto Nacional de Deportes. Luego el Dr. Cesar Clemente le hizo entrega al Dr. Belisario Aponte de los documentos de propiedad del nuevo campo deportivo. El Dr. Gastón Montiel leyó el documento de entrega de la obra por parte del Ejecutivo del Estado al IND. La bendición de la obra estuvo a cargo del Presbítero Marcos Petit y luego el Teniente Coronel Franz Risquez corto la cinta simbólico y se dirigió con emotivas palabras a los presentes para destacar la importancia del acto y los planes que se tenían para desarrollar allí diferente actividades deportivas.

Antes del partido se efectuó una sencilla ceremonia en el nuevo campo beisbolero el cual se cumplió con el desfile de los equipos a enfrentarse esa tarde acompañados de sus respectivas madrinas, personeros de la Liga Occidental de Beisbol profesional y miembros del Instituto Nacional de Deportes. El Mayor Carlos Camacho, en su carácter de Presidente de la seccional Inedista del Distrito Bolívar realizo el primer lanzamiento del juego para que los equipos Cabimas y Pastora se enfrentaran en este juego. 

El equipo Pastora fue el ganador, manteniendo su invicto en el torneo al derrotar al equipo Cabimas 4 x 1 carreras. Hay que mencionar que el equipo Cabimas realizaba sus prácticas en el estadio Concordia y en este mismo estadio, como tenia alumbrado, se realizaron varios encuentros de beisbol profesional de la liga occidental. 

Hoy el Estadio lleva por nombre el de un ex grande liga nativo de esta generosa y pujante tierra: Víctor Davalillo.     

Nelson Marcano Urribarri

viernes, 31 de agosto de 2012

El Mercado Libre de Cabimas


Para el año 1952 Cabimas tenía un mercado que estaba ubicado en lo que se llamaba comúnmente “el centro de la ciudad”. Era una ubicación muy buena pero que con el paso del tiempo fue quedando mas y mas lejos de la mayoría de los barrios que iban naciendo, porque Cabimas tuvo un crecimiento muy desordenado y los  barrios se formaron muy rápidamente y en esa medida el mercado fue quedando cada vez mas lejos de esa población mayoritaria.

Estaba el mercado ubicado muy cerca del lago para poder recibir con facilidad y rapidez todos aquellos productos que llegaban a través de las piraguas o el transporte lacustre, vía natural por excelencia en esa época, eran los productos y mercancías  que tenían que ver con el quehacer diario del Cabimense y que llegaban para su comercialización.

Pero en la esquina de la calle Bolívar y la calle Las Mercedes venía funcionando un  mercado libre desde hacía bastante tiempo pero que ya la población solicitaba que lo hicieran de nuevo porque era un edificio viejo, deficiente y destartalado. Se mantuvieron campañas para que lo demolieran e hicieran algo consonó con la transformación que se estaba llevando a cabo en la ciudad y fue así como el M.A.C. (Ministerio de Agricultura y Cría) doto a la ciudad de este nuevo edificio para que siguiera cumpliendo funciones como Mercado Libre.

El sábado 16 de Agosto de 1952 se inauguró un edificio nuevo para instalar allí el Mercado Libre de Cabimas habiendo asistido al acto los representantes del gobierno y público en general. El corte de la cinta estuvo a cargo del Dr. Enrique Cárdenas Becerra, Director de Economía Agrícola del M.A.C.; la bendición del local a cargo del Pbro. Briñez. Luego el Sr. Jose Semidey Reyes hablo de la importancia y las ventajas que representaban para la economía popular la creación de estos mercados. Cuando terminaron los actos oficiales el Sr. Zebb Mayhen en representación de la compañía CREOLE ofrecieron a la concurrencia un brindis. Entre la concurrencia estaban el Dr. Enrique Cárdenas Becerra; Melchor Díaz, jefe de la división de Mercados Libres;  Dr. Heberto Urdaneta Pérez, en representación del Ejecutivo Regional; Sr. Virgilio Reyes de la prefectura Distrital; los Pbros. Briñez y Petit; Sr. Antonio J Rivero, Inspector de Vehículos; Cap. Luis Villamizar; Tte. Valderrama Cordero; Rogelio Cepeda; Daniel Perozo Díaz; Godofredo Borjas y otros.

Ya la población se había dado cuenta de lo beneficioso que era comprar en el Mercado Libre y no paso mucho tiempo para que todos acudieran en forma masiva a realizar sus compras. Las actividades del Mercado se iniciaban los días miércoles en la noche hasta el día domingo donde el local se convertía en algo pintoresco mezcla de feria y mercado donde se conseguían productos muy variados desde el pollo criollo, los enlatados, la carne fresca, la carne de monte, pescados fresco y salado y hasta el casabe margariteño.



El Mercado Libre cumplió una importante labor dentro de la comunidad pero al ocurrir otros cambios en la ciudad el mercado tuvo que cerrar sus puertas. Allí permaneció cerrado por un buen tiempo hasta que instalaron a los vendedores de tostadas y fritangas que estaban situados frente a la Prefectura del Municipio y ahora se llama El Mercado de las Tostadas.


Nelson Marcano Urribarri

miércoles, 8 de agosto de 2012

UN RATO CON EL CRONISTA DE CABIMAS. PEDRO RAMÓN ESTRADA


Estaba terminando de realizar la obra PIONEROS perteneciente a la Serie Cabimas, una muestra de 9 obras que estoy preparando para una exposición en honor a esta mi querida ciudad natal, y no encontraba una fotografía en internet del obelisco del obrero que una vez existió en el casco central entre la Plaza Bolívar y el edificio de La Prefectura y entonces recordé que un año atrás, había contactado al Lic. Pedro Ramón Estrada por motivo del Reencuentro de los 45 años del Liceo Alfredo Jahn.  

Imaginé que como gran cronista conocedor de esta tierra, mi requerimiento tendría respuesta y así fue.  Rápida y amablemente me ofreció disposición inmediata para atenderme, y esto fue lo que pasó:
Con entusiasmo llegue a la cita, y allí estaba el Sr. Estrada con su rostro amigable esperando poder ayudarme en mi trabajo.  En su biblioteca, con todos los reconocimientos recibidos, recuerdos  y con todo el material que durante su vida ha producido a punta de una máquina de escribir manual ya que ni siquiera utilizó la eléctrica, y aunque posee una laptop que se la obsequiaron, dice que no la sabe usar y que sus hijas y nietas lo apoyan mucho, cosa que me llenó de curiosidad y me llevó a hacerle el siguiente comentario, “Sr Pedro si usted todo esto lo ha logrado sin la tecnología de hoy día, que tanto más  hubiera hecho por Cabimas y sobre todo por el Sector Educativo Público. Lo digo como una de las beneficiadas por todas las gestiones que hizo como integrante de la sociedad de padres y representantes que se formó para que se fundara el Liceo Alfredo Jahn, muy necesario para la demanda de alumnos que año tras año se estaban sumando en lo que antes era Municipio Cabimas, hoy comprendido por los Municipios Cabimas y Simón Bolívar; en la mayor parte de las veces trabajando a sus propias expensas. Muchas Gracias Lic. Pedro Estrada.

Hablo de un rato que se transformó en muchas décadas y anécdotas de información, mientras buscaba y buscaba fotografías del Obelisco que según me contó, tenía como 5mt de altura, estaba ubicado entre la Plaza Bolívar y el Edificio de La Prefectura y que fue demolido en el año 1958 inmediatamente después de salir del poder el Dictador Pérez Jiménez.  También me contó que trabajadores petroleros sindicalizados que no estaban de acuerdo con dicho monumento, lo demolieron y  en su lugar se construyó una Redoma llamada Plaza del Obrero, actualmente nada de esto existe es la zona del semáforo que esta frente a la Catedral, pero en realidad si me pongo a relatar todo lo que me contó ya dejaría de ser un relato sobre él.

No quiero extenderme mucho porque hablar del Sr Pedro Estrada es materia de varios relatos, debo empezar por decir que nació en el sector La Montañita de Cabimas, un 27 de Abril del 1929, hijo de Pedro Borjas Nava y Antonia Benita Estrada. Hizo toda su vida en Cabimas, se casó con Celinda Corona de Estrada con la cual formó su hogar de cuatros hijos 2 hombres y 2 mujeres, actualmente rodeado de los hijos de sus hijos también, como un hermoso abuelo y bisabuelo.

De joven quiso ser médico, pero las condiciones reinantes en materia de educación media en su época, lo llevaron por otros caminos, ya que no habían escuelas o liceos de secundaria en Cabimas. Su educación primaria la hizo en tantas escuelas que no sé qué hubiera hecho yo si me hubiera tocado algo parecido. Empezó en el patio de una casa en la montañita donde fungía la escuela Valmore Rodríguez, de allí a la escuela Pedro Julio Maninat en Concordia, luego en la escuela Rafael María Baralt y finalmente en la escuela Nuestra Señora de Chiquinquirá que luego fue llamada Hermágoras Chávez.

Una reflexión de cómo se estudiaba en esos tiempos y que sería bueno que nuestros estudiantes de hoy día aprecien, ya que con un sinfín de recursos que antes no se tenían, instalaciones, transporte, alimentos, libros, bibliotecas virtuales, computadores y hasta laptos y unos padres que le hacen casi todo, al final creo que se gradúan los padres otra vez con los hijos. A lo que iba, El Sr. Pedro me contó que cuando estudiaba en la Pedro Julio Maninat, donde coincidencialmente yo realicé toda mi educación Primaria, ambos muy orgullosos de ello, iba tres veces a la escuela, 2 veces en la mañana porque tenían una actividad extra aula, y 1 en la tarde, se iba a pie desde la Montañita hasta la escuela que muchas veces le llevaba casi una hora. Ahora nuestros muchachos tienen todo y no tienen las ganas ni empeño por estudiar.

Como siempre debo poner algo sobre la reflexión de todos, y sabiendo que las comparaciones no son buenas porque las épocas y las condiciones son tan distintas, creo, que lo poco que teníamos antes en materia de educación es más que lo vemos hoy, los maestros, el doble turno, la búsqueda de que el estudiante saliera muy bien preparado, y los estudiantes más dispuestos a recibir todo ese cúmulo de conocimientos que casi solo podíamos obtener de ellos, yo debo agradecer que todo el material educativo requerido en mi primaria me fue suministrado por la Creole y Lagoven, SA, ya que fui hija de trabajador petrolero. Ambos, tanto el Sr. Pedro como yo coincidimos en la calidad de la educación que recibimos en esta escuela, de la cual me mostro fotos de cuando la construyeron, del Presidente y Director de la misma, Pedro Julio Maninat, quien hizo mucho por la educación en Cabimas y hasta del Municipio Lagunillas.

El Sr, Pedro estudió Comercio, lo cual le ayudó a trabajar como oficinista llevando la contabilidad en una empresa contratista, de allí su mayor oportunidad de cambio, en neurolingüística, se conoce como el quiebre, que lo llevó al Periodismo. Logró entrar a trabajar por recomendación de una persona amiga en la Creole Petroleum Corporation y de allí sus 42 años en la Industria Petrolera

Pero fue definitivamente, cuando se crea la Escuela de Periodismo, que permitía el ingreso de aquellos estudiantes con cierta experiencia y conocimientos en Periodismo, que acepta el gran reto, ingresa a estudiar Periodismo en la Universidad del Zulia y en paralelo saca o estudia en 2 años por educación parasistema, el bachillerato. En 1963, se gradúa como Lic. en Periodismo, en la Primera Promoción de Periodistas, de la cual les anexo fotos, al año de graduarse comienza a trabajar en Relaciones Públicas de Creole y luego Lagoven, S.A por 16 años, así que laboró 26 años como oficinista y 16 en Relaciones Públicas.   

 También trabajó con el Monseñor Roberto Lucker, durante 8 meses, apoyándolo como asesor con los trabajos en la Ejecución del Parque Bolívar.

La razón que realmente me motivó a realizar este relato sobre el Sr. Estrada es mi admiración por su vocación manifiesta en todas las gestiones que durante su vida ha realizado en favor de los estudiantes de Educación Pública en Cabimas, cito por ejemplo las que hizo en Pro de la Fundación de algunas escuelas o liceos o simplemente por el logro de edificaciones sedes de las mismas, entre ellas, La Escuela Valmore Rodríguez, el Liceo Alfredo Jahn, la Extensión Luz Cabimas, La Andrés Eloy Blanco en  el Liceo Pedro J Hernández y el Jesús Semprún nocturno por parasistema.

Cuando escuchamos hablar del Lic. Pedro Ramón Estrada, inmediatamente lo relacionamos como el Cronista de Cabimas y no sabemos que solo fue  partir de 1996 cuando se le presenta la oportunidad de concursar para cumplir y continuar  la labor de su antecesor el cronista José Ramón Morales, cuando la Cámara Municipal de Cabimas, llama a un Concurso para ser El Cronista de Cabimas, se formó un comité para estudiar las propuestas que presentaron entre otros, Pedro Ramón Estrada, José Rosario Urribarrí, Martiniano Sánchez, Humberto Ochoa. El ganador fue el Lic. Pedro Estrada y fue aprobado por la Cámara Municipal.

Muchas son las órdenes, condecoraciones y reconocimientos que ha recibido por su labor durante toda su vida, solo quiero mencionarles algunas:
  • -       Como Orador de Orden, en actos oficiales en Periodismo, Instituciones de Educación Pública.
  • -       Fue nombrado como Personaje del Año, por EL REGIONAL (1999).
  • -       Ganador de Varios Premios de Periodismo.
  • -   Condecoraciones en 1era, 2da y 3era Clase (Mérito al Trabajo) en diferentes Instituciones Culturales, Educativas,
  • -       Gobernación y  Asamblea Legislativa: Francisco de Miranda (Periodista).
  • -       Cámara Municipal. Única Clase Basilio Antonio Borjas.
  • -       UNERMB. Doctorado Honoris Causa.
  • -   Personaje Ilustre, Persona Distinguida (Cronista), en varios estados de Venezuela, como Barinas, Barquisimeto, entre ellos.    

Siempre agradezco las buenas intenciones y el apoyo desinteresado que alguien como el Sr. Pedro Estrada le brindan a cualquier persona o ente gubernamental que se les acerque o acuda a ellos.   Me hizo recordar mucho a mi padre, que consideraba que el verdadero valor del conocimiento era el que se compartía, decía, “nunca te quedes con lo aprendido, ayuda y compártelo con otros”.

Quiero finalizar este relato con mi eterno agradecimiento al Lic. Pedro Ramón Estrada, por su amable atención y toda la información que me suministró para las futuras obras que realizaré tanto como Pintora como Relatora de mis obras alusivas a la Ciudad de Cabimas, pero sobre todo, por tan agradable momento que me hizo disfrutar.  Pido a Dios y a la Virgen del Rosario, porque le bendiga a El y a toda su familia y permita seguir con esta encomiable labor que hasta ahora ha realizado, porque sé que la hace de todo corazón, pero sobre todo, que le permita, realizar en el corto plazo, su sueño de publicar los 4 libros que ya tiene terminados. Sé que encontrará alguien que le ayude a lograrlo con la bendición de Dios, ya sea la Alcaldía de Cabimas, la Cámara Municipal que lo reconoce como Cronista de la Ciudad, las Universidades e instituciones que lo reconocen como persona ilustre, entre ellas La Universidad del Zulia y La Universidad experimental Rafael María Baralt y PDVSA

Carmen Martinez
12/12/2011

jueves, 12 de julio de 2012

El Obelisco de Cabimas



Hasta el año de 1952 Cabimas seguía siendo la ciudad explotada en sus extrañas para extraerle ese rico mineral que cambio prácticamente todo en Venezuela. Se dio a conocer a nivel mundial y modifico sustancialmente la economía del país sin tener que hacer, sus habitantes y autoridades, casi nada para ello, solo prestar el subsuelo para la extracción. Poner a los mejores hombres deseosos de un trabajo rentable, que no existía para la época, para de esta manera las compañías especializadas en ese tipo de labores realizaran también lo que ellas sabían hacer, extraer, vender, comprar y pagar por esa labor.
           
 No había ni siquiera simbólicamente, un reconocimiento verdadero a esa labor de las personas que prestaron y prestaban su mejor esfuerzo a la industria que generaba la riqueza del país. Se hacían los reconocimientos a través de las empresas a los que de alguna manera habían permanecido por años en la industria, pero al obrero o trabajador petrolero caído en sus labores no se le hacían reconocimientos.


Entonces las autoridades decidieron levantar un obelisco que recordara permanentemente esa fuerza, la fuerza de los caídos en sus labores. Destacar el tesón que lograron poner día a día en sus puestos de trabajo para lograr las metas propuestas entre el trabajador, las empresas y el país. Una bonita manera de recordar todas esas penurias, lagrimas, tristezas y risas que acompañaban a todo ese quehacer productivo que se brindaba.

Se procuro que tuviera una buena altura para que se viera desde una distancia considerable y que estuviera enclavada en un lugar donde fuese visto muchas veces, que se viese a diario en una calle bien concurrida y se pensó en el centro de la ciudad. Estaría levantada en el centro del cuadrado que se formaba desde el frente de la plaza Bolívar hasta la Iglesia Nta. Señora del Rosario. Un espacio bastante amplio y que al levantar el obelisco allí iría a mejorar la circulación de los vehículos en ese espacio.
           
Se estuvo especulando durante un buen tiempo, cuando estaba el obelisco en proceso de construcción, que no podía ser el monumento al obrero caído por que, ¿Cuál obrero seria este para usar su nombre? Determinar ese nombre era y es una tarea engorrosa y difícil por que como sabemos los inicios de la explotación petrolera en Cabimas, como en otras partes del país, estaba saturada de improvisaciones tanto en el equipamiento y maquinarias como en las nominas que manejaban los empleadores donde muchas veces no tenían ni listas de empleados, en otros casos los obreros entraban a trabajar por su cuenta y a veces lo hacían en mas de una compañía, además no se llevaban registros de accidentes ni de conatos de incendios  que se presentaban muy seguidos en estas empresas.
Lo otro era, a cual trabajador iba a representar, al venezolano, al norteamericano, al chino o al de las islas vecinas. Era difícil determinarlo sin embargo el obelisco siguió siendo un homenaje al obrero caído.
           
La comisión de urbanismo del Distrito Bolívar lo autorizo y la ingeniería Municipal fue el encargado de su ejecución. Seria una pirámide cónica de base cuadrada de 2x2 metros y con 20 metros de altura, ubicada en el centro de un área de 4x4 metros con 8 secciones de tubos colocados en las esquinas formando con ellos una baranda que estaría rematada por varios tramos de cadena y se le colocaron las placas alusivas al monumento.



El sábado 8 de Noviembre de 1952 fue el día seleccionado para la inauguración de tan importante monumento y en horas del mediodía se hicieron presentes en la tarima levantada para realizar los actos de inauguración los miembros de la Junta de Gobierno y algunos ministros del despacho procedentes de la Capital de la Republica. Entre ellos estaban el doctor German Suárez Flamerich presidente, y los coroneles Marcos Pérez Jiménez, Ministro de la Defensa y Luís Felipe Llovera Páez, Ministro de Relaciones Interiores, el secretario Doctor Miguel Moreno junto con otros militares del despacho. El Doctor Cesar Clemente Rodríguez Sindico del Concejo Municipal le dio la bienvenida  a tan ilustres personeros y el Doctor Suarez Flamerich expreso conceptos elogiosos para los habitantes de la zona petrolera y dando las gracias por el recibimiento del cual habían sido objetos. Le siguió en el orden de palabra en nombre de los trabajadores de Cabimas el señor Humberto Ochoa para saludar a los miembros de la Junta de Gobierno. Seguidamente lo hizo el Doctor Tinoco Rodil, Ministro del Trabajo quien cerro el acto planificado ese día.
De allí los miembros de la Junta de Gobierno siguieron para Lagunillas a cumplir parte de la agenda planificada por su visita.   

 Después de la “caída” del régimen de Marcos Pérez Jiménez muchas cosas cambiaron por la actitud violenta de la población y otras por que las nuevas autoridades deciden cambiar o darle otro rumbo a lo que venia siendo norma. El obelisco tuvo la mala fortuna de caer producto de la piqueta demoledora también. Como el obelisco de alguna manera había “ordenado un poco” el transito vehicular a su alrededor las autoridades optaron por construir una especia de “rotonda” para que cumpliera ese fin.

Nelson Marcano Urribarri.


martes, 29 de mayo de 2012

Los Primeros Ferrys llegaban a Cabimas desde Maracaibo


Para el año 1939 la vía de transporte por excelencia de los pueblos costeros llámese a estos Palmarejo, Santa Rita, Cabimas, Gibraltar, etc era el Lago de Maracaibo el cual era recorrido diariamente por todo tipo de embarcaciones, excepto ferrys, movilizando todo lo que había que movilizar de un sitio a otro del lago. Animales, personas, equipos, enseres, artefactos, productos, mercancía, etc, todo era movilizado a través de estas embarcaciones.
Tenían  diferentes tamaños y formas, con diferentes sistemas de propulsión, el remo, la vela, el motor de vapor utilizado en los llamados “vaporcitos” y los motores de combustión interna que trabajaban con Diesel eran de uso común en las embarcaciones de mayor calado y capacidad.

Ya existían los vehículos de pasajeros y de carga en diferentes ciudades del país pero no existía una buena red de carreteras ni de puentes, todos eran caminos de arena y ríos que había que atravesar luchando contra la corriente. Era un verdadero episodio de aventuras el trasladarse desde un estado a otro del país, de un sitio a otro dentro del mismo estado por carretera, era un viaje impredecible y tardío.

Cada pueblo costero tenía uno o mas muelles para la llegada de las embarcaciones y permitir así el embarque y desembarque, los denominaban el muelle municipal o por numero, muelle  numero 1, numero 2, etc. Las compañías petroleras tenían sus muelles también construidos de acuerdo a sus necesidades para el embarque y desembarque de todo lo que se requería en la industria.

El problema mayor se estaba presentando era en las ciudades mas pobladas y Cabimas por su alto numero de pobladores debido al “boom” petrolero era una de ellas, gran cantidad de vehículos que existían en la costa occidental y en la costa oriental y se estaba buscando la forma de como trasladarlos de una costa a la otra con rapidez y seguridad para los intercambios comerciales y de otras índoles en las cuales se requería movilizarse con el vehiculo entre las riveras. Al unir estas dos costas por medio de un ferry estaban uniendo también a Maracaibo con el resto del Pais.

El puerto de Maracaibo tenía para el año 1934 una gran cantidad de embarques y desembarques al año, puesto que era un puerto de mucha importancia para la región occidental del país y, en ese año,  el Dr. Carlos Julio D’empaire le planteo al gobierno la idea de adquirir un tipo de embarcación llamado Ferry boats (Barco de paso o transbordador) para ponerlos en servicio pero la idea no tuvo acogida y no se concreto durante la presidencia de Juan Vicente Gómez. Fallecido este en diciembre del año 1935 se siguió manejando la idea de poner en servicio los ferrys.


El 30 de abril del año 1938 se constituye la empresa: “Compañía Anónima de  Transporte Translacustre”.
Que es la empresa formada para iniciar la adquisición y el manejo de los ferrys. El señor Manuel Belloso uno de los fundadores de la empresa y Carlos Julio D,empaire viajaron a los estados unidos con la intención de adquirir una unidad usada pero a la final decidieron y aprobaron la construcción de una nueva. Buscaron el asesoramiento respectivo y establecieron contacto con el arquitecto naval Eads Johnson a quien le dieron las características que debía tener la nave: como entrada lateral para vehículos para facilitar la plegada de la planchuela a los muelles de poco calado. El capital inicial fue de cuatrocientos mil bolívares que depositaron en el banco de Maracaibo y luego de cerrada la negociación comenzó la fabricación del primer ferry que iban a construir para el lago de Maracaibo


A ese primer ferry le pusieron por nombre “COQUIBACOA”

           
                    (Foto de Panorama, 21 de enero de 1939. El Coquibacoa navegando en el río Sabin
                     Texas, probando los motores y poniéndolos a punto)



El Coquibacoa tenia en sus dimensiones 132 pies de largo por 40 pies de ancho y 10 pies de altura del casco, calará a toda carga 5 pies y 230 toneladas de peso.(Son 40,26 metros de largo x 12,20 metros de ancho, con un calado de 1,52 metros)
Estaba propulsado por dos motores “Atlas Imperial” de Gasoil y en las pruebas de velocidad efectuadas el 4 de enero, el ferry desarrollo un promedio de 12.9 millas por hora. Cada uno de sus motores desarrollaba 200 H:P: de fuerza
Estaba equipado con dos bombas contra incendio, compresores de aire, además tenia como equipo opcional para casos de emergencia dos generadores de 7 Kw cada uno suficiente para el consumo eléctrico de la nave. 8 extintores contra incendio de 2 ½ galones cada uno manual. La capacidad del ferry era de 28/30 vehículos –camiones y automóviles- en el primer puente y en el segundo puente tenia una capacidad para 400 personas. Este segundo puente tenía instalación sanitaria separada para damas y caballeros. Tenía en la parte de atrás dos botes salvavidas de 16 pies de largo cada uno. 400 salvavidas del tipo de correa colocados debajo de los asientos. La construcción del ferry boat es toda de acero soldado y tiene únicamente de madera la caseta del piloto y un compartimiento en el puente de arriba.

El ferry Coquivacoa hizo su arribo al lago de Maracaibo el 19 de Febrero de 1939 y empezó a prestar servicio Maracaibo-Cabimas y viceversa el día domingo 22 de Febrero de 1939.

A finales de febrero de 1939 se abre la licitación para la construcción de la terminal del ferry en Palmarejo y La compañía Translacustre era la encargada de contratar la construcción del referido muelle. Según la licitación, este muelle será  todo de concreto armado y tendrá un largo de 235 metros y estará ubicado en un terreno que adquirió la Translacustre en Palmarejo, el punto más cercano a Maracaibo. Este muelle contara además con todas las instalaciones necesarias para hacer más grata la espera del ferry.
El 6 de junio de 1940 fue toda una gran fiesta en Maracaibo por que en este día, es inaugurado el Terminal de Ferrys de Palmarejo, estado Zulia, con un magnífico muelle de concreto armado que sustituyó al viejo que era de madera y que, ubicado cerca de Cabimas, servía de terminal a los Ferrys que cruzaban el Lago de Maracaibo. Los Ferrys, el Coquivacoa, en servicio desde 1939 y el Catatumbo, en actividad desde abril de 1940 trasladaron su punto de llegada y salida para el nuevo  muelle.

El 19 de abril de 1940 entro en servicio el ferry CATATUMBO y los primeros viajes los hicieron Cabimas-Maracaibo y viceversa  y luego a partir del 6 de junio de ese año los dos ferrys que estaban en servicio comenzaron a recorrer la ruta Maracaibo-Palmarejo.
                     

Este ferry Catatumbo tenía las mismas características de construcción que el ferry Coquivacoa.
Finalizada su construcción por la misma compañía que lo construyo en Orange, Texas, USA, el ferry realizo sus pruebas en el río Sabin el 21 de Marzo de 1940. De allí partió para Venezuela y empezó a prestar servicio el 19 de abril de 1940.

Luego siguieron el Cabimas, con 150 pies de largo y 34 pies de ancho (52,10 metros de largo x 10,37 metros de ancho) y fue probado el 21 de Diciembre de 1946.
El Cacique, con 159 pies de largo ( 48, 49 metros de largo) Probado el 28 de mayo de 1948.
El Caracas con 175 pies de alargo ( 53, 37 metros de largo) Probado el 23 de Febrero de 1950.
El Cordillera con 195 pies de largo ( 59,47 metros de largo)
El Colon con 200 pies de largo ( 61 metros de largo) Probado el 7 de Mayo de 1958.
Existieron otros como El Caroni, Cumarebo, Coro, Ceuta, etc. Pero todos fueron bautizados logrando que el nombre fuera de alguna región o algo emblemático del país y cuyo nombre empezara por la letra C en honor a la señora Doña Cruz Nava de Belloso.

Nelson Marcano Urribarri


jueves, 12 de abril de 2012

Veteranos de Lagoven


En mis 21 años de jubilado, nunca se me ocurrió escribir sobre los trabajadores veteranos de Lagoven que han sido homenajeados por sus 25, 30, 35 y 40 años de servicios.

Confieso que cuando uno está dentro de esa realidad, se exime de valorar lo que lo que uno representa o en lo que está sumido, hablar sobre esa etapa en lo cual uno formó parte, parecería una inconsecuencia o lisonja indebida.

Así lo valoro, cuando existe una situación de afecto con quienes fueron sus compañeros de trabajo, o con los que conociera en esa misma empresa en una larga etapa de muchos años de convivencia.

Durante los 42 años que tuve en la Creole Lagoven, 26 con mis compañeros del Eléctrico en el cual fui secretario y 16 como periodista en Relaciones Públicas, logré mantener un afecto y aprecio con ellos y sus familias e igualmente con el extenso número de trabajadores de las demás organizaciones y áreas de Occidente, que hoy me siguen guardando una consideración y respeto que no puedo desconocer y menos olvidar.

Por eso, cuando ese trabajador al cual encontré en un supermercado, me insinuó escribir un artículo sobre los veteranos Creole, me impactó su pedido y le prometí hacerlo realidad.
Todos son conocedores, que he escrito sobre las dificultades que los veteranos jubilados confrontan con la asistencia médica, con el cobro de las pensiones en los bancos y el fondo de pensiones y siempre he estado al lado de ellos para acompañarlos en sus reclamos.

Hoy quiero hacer honor a esos veteranos, principalmente a los del año 1988, cuando las empresas en todas las áreas del país, rindió el acostumbrado homenaje a los veteranos que cumplieron 25, 30, 35 y 40 años o más de servicios en la empresa.

En ese homenaje, estuvieron presentes nuestras esposas y la asistencia de los gerentes y personal mayor de cada organización. A mí me tocó ser Orador de Orden en nombre de los trabajadores de Occidente y en mi intervención hice notar lo siguiente: “estamos conscientes que siempre hemos sabido responder a las exigencia de la empresa. Se nos halaga que somos los trabajadores que la empresa requiere y que debemos transmitir nuestras enseñanzas a los nuevos o jóvenes que ingresan a la empresa. Sobre esto, he de destacar, pueden tener la certeza que no los defraudaremos y pueden contar que así como lo han hecho nuestros anteriores compañeros, lo haremos nosotros y lo continuarán los posteriores veteranos”.

Estos conocimientos que recibimos, no los hemos olvidado y nos ha permitido ofrecer nuestros servicios con la eficiencia, puntualidad, organización y dinamismo y ello está demostrado en la labor que vienen cumpliendo en muchos campos de trabajo los integrantes de “Gente del Petróleo”.

Finalmente estos veteranos de la Creole, han creado una organización, para mantener vivos esos propósitos con las cuales nos formamos con tanta devoción y entrega en esa empresa.

Lcdo. Pedro Ramón Estrada
Cronista de Cabimas

El nombre de "Coquivacoa"

El nombre de Coquivacoa era el que se otorgaba al Lago en el pasado. De acuerdo a un trabajo publicado en el “Zulia Ilustrado” el 31 de enero de 1890, Coquivacoa procedía del vocablo co-quimbo, que significa lugar lluvioso y cua, forma contractada de guab que significa, el modo de ser o de estar de alguna cosa, o lo que es lo mismo “lugar que tiene la particularidad de ser un sitio de mucha lluvia o donde llueve con mucha frecuencia.

Hace referencia también el “Zulia Ilustrado” que este nombre aparece en todos los mapas antiguos y en los documentos y relatos de la época que mencionan esta región, pero lo escriben de diferentes maneras, tales como, Coquivacoa, Cochivacoa, Aniquevacoa, Quinquivacoa y Chichivacoa entre los mas conocidos.

En los mismos documentos se dan casos donde varía la ortografía; la forma Chichivacoa pareciera una influencia italiana es probable que sea Pedro Martín de Angleria, que escribió lo que los castellanos pronunciaban como “Quiquivacoa” según la ortografía de su propia lengua.
El nombre de Coquivacoa se extendió y logró cierta fama, nombre que se le daba a la punta más septentrional de la Guajira o al mismo Golfo de Venezuela por lo que sería necesario indagar si allí existió una localidad que mereciera ese lugar donde llueve constantemente.

En base al tema de este artículo, en el libro “Maracaibo del Pasado”, el Dr. Manuel Matos Romero, señala que los aborígenes llamaban al “Lago de Coquivacoa” con el nombre de “Lago de Nuestra Señora” que descubrió Alonso de Ojeda el 24 de agosto de 1499, pero que lo españoles llamaban Golfo de Venezuela o Laguna de Maracaibo, al cual Ojeda dio a una de sus bahías como Puerto de San Bartolomé.

Alonso de Ojeda se quedó admirado del sitio y llamó por este nombre la Península al Oeste del Golfo de Venezuela, a pesar de que el nombre no figura en el mapa dibujado por su piloto Juan de La Cosa. Cuando Ojeda regresó a ese lugar en junio de 1501, Ojeda fue nombrado Gobernador de la Provincia o isla Coquivacoa.

Según versiones del padre Simons, existen posibilidades de que así se llamara el vecindario de las montañas de Macuire, al extremo norte de la península, de las cuales dice este explorador que cerca de ellas está el cabo Chichivacoa de nuestros mapas.

No es necesario imaginar que la cantidad de lluvia fuera cuantiosa para que llamara la atención de los pobladores de una región que generalmente es muy árida y seca y además donde la frecuencia de las lluvias, muy bien podía dar motivo al nombre tal con el cual se le conoce.
Además de esto, el padre Simons dice que observaron algunas indias bellas y de buenas disposiciones, afirmando ese historiador que en el país del lago en aquella época, había más gentiles mujeres que en otras partes de aquellas tierras, asegurando que eran de mucha gracia y hermosura.
Lcdo. Pedro Ramón Estrada
Cronista de Cabimas

miércoles, 11 de abril de 2012

Beneda 40 años deleitando con sus empanadas

La región cabimense es también una ciudad prodiga de emprendedores. La pintura, escultura, artesanía, gastronomía, el diseño y tantas otras cosas que se reflejan en la mente de nuestras gentes y hacen que Cabimas ocupe un lugar significativo, merecedor de los mejores reconocimientos.

Es así como esta ciudad tiene en su seno dos valiosas mujeres, sencillas humildes que con su trabajo diario llevan el sustento a su familia y que por esa razón merecen recibir una condecoración de Merito en el Trabajo y al mismo tiempo una pensión por sus largos 40 años de servicios en sus comunidades.

Ellas son Benedicta Pineda de Alcántara y Zoraida Villarroel, las dos provienen de mi barrio La Montañita, pero Zoraida vive en la calle El Rosario donde atiende a su numerosa clientela.

Hoy sin embargo, porque así se lo ofrecí, me voy a referir a Benedicta, a la que conozco cariñosamente como Beneda. Ella, nativa de Cabimas, pero vivió su niñez en el desaparecido poblado de Palito Blanco, lugar donde tiene ahora Pdvsa sus depósitos de materiales y hasta donde esta ubicada la estación de servicio 21. Luego se traslado a El Cardonal y al demoler ese barrio fueron trasladados a Los Laureles. No contentos con el sitio se vinieron al barrio La Montañita, donde aun permanece en la calle El Silencio frente a la parada de colectivos El Gasplant.

A los 15 años se caso con Lucidio Alcántara, un trabajador petrolero de la Creole, quien tuvo un accidente grave en una explosión y murió hace 22 años, pero antes la empresa lo jubilo.

Desde entonces Beneda, a la cual conoce toda la colectividad de La Montañita, comenzó, hace mas de 40 años, a preparar sus empanadas y pastelitos a la edad de 24 años y ahora arepitas, con lo que levanto a sus 10 hijos, cinco hombres y cinco mujeres y un nieto que son su felicidad y de quien tiene su mejor orgullo, porque ellas, Leudis, Luisa, Lolimar, Libisay y Lilibeth son profesionales.

En la conversación con ella en su residencia, estaba Jackeline Camargo, su sobrina, quien nos señala que Beneda se levanta desde las 4 de la mañana para preparar los guisos y elaborar las empanadas, que coloca en una paila grande y que poco a poco extrae para completar mas de 800.

A las 9 de la mañana es vendida toda la existencia por los asediados clientes que pacientemente esperan por sus pedidos que degustan con sumo placer.

Hablar con Beneda no fue fácil, primero su negativa, luego su viaje a Florida para visitar a una hija y después días de enfermedad, hasta ahora que tuve el apoyo de sus hijas y una sobrina para lograr esta tarea.

Tengo la certeza de que este artículo va a merecer una satisfacción para el conglomerado de La Montañita, donde Beneda, goza de gran afecto y simpatía.

Lcdo. Pedro Ramón Estrada
Cronista de Cabimas

Quintin, Terebeque y El Diablito personajes del ayer

Resulta interesante recordar y escribir un tema de personajes que en el ayer, fueron en esta tierra figura que llenaron un vacio por su espontaneidad, ocurrencias y sus andanzas en el centro de la ciudad.


Ellos se ganaron el afecto de los habitantes al frente de sus negocios que eran sitios de distracción y juego. Era la Cabimas de ensueño que comenzó con la construcción del puente sobre el lago, el hospital general, el centro cívico, su boulevard y el plan Cabimas.

Me refiero a Quintín Piñero Soto un nativo de Punta de Leiva, de donde llegó desde muy pequeño y estableció después el negocio denominada Bar Princesa en toda la esquina de la calle Colón y la del Rosario, para emular el nombre del Bar Princesa en Maracaibo.

Por su parte “Terebeque”, su verdadero nombre era José Perozo, nativo de Cabimas de esas familias tradicionales de esta ciudad. Creó su negocio el Bar Sandino, tal vez influenciado por la figura del líder nicaragüense César Augusto Sandino, también en la esquina de la calle Colón y El Progreso de esta ciudad.

El otro personaje Adelso Nava conocido como “El Diablito” tenía un quiosco de venta de cerveza en el casco central de Cabimas, frente al antiguo Pasaje Sorocaima, tan recordado por los cabimenses por ser sitio de encuentro de sus pobladores.

Este Bar Princesa era conocido por muchos profesionales, deportista y otras personas por ser un lugar de recreación para ellos, por existir mesas de billar, dominó y barajas y remate de caballos con apuestas elevadas que disfrutaban por ser sus entretenimientos favoritos.

El bar Princesa tenía entre sus más fervientes visitantes a Ernesto Aparicio, Manuel Vílchez, Ramoncito Arias, Muñequito Martínez y muchos conocidos profesionales y artistas. Además Quintín, disfrutaba de los carnavales, sobre todo el juego de agua, y entre sus anécdotas, nos decía Victor Marcano, quién nos habló de estos personajes, está el hecho de un policía que le reclamó la razón de cerrar su negocio a las seis de mañana, respondiéndole que lo hacía porque ese bar era de él y lo mantenía abierto hasta la hora que él quisiera.

Ese negocio tuvo una duración de mas de 70 años y se inició en la ocasión en que hubo un incendio en esa calle Colón.

Quintín murió el 24 de octubre de 1989 y el negocio lo asumió su hermano Ramón que murió unos años después.

Con referencia al bar Sandino, era similar al Princesa con salón de billar, dominó y otros juegos.

Este bar se lo donó a Terebeque el señor Guillermo Rodríguez, contratista de las petroleras, al cual conoció cuando estaba encargado de un restaurante y después el Club Standard de Tía Juana.

Nuestro personaje José Perozo “Terebeque” era un hombre pequeño, cojo en el andar por lo cual sus amigos le jugaban muchas bromas, era chistoso, bromista y siempre alegre, recorriendo las calles de Cabimas ante la mirada risueña de sus amigos por la forma de caminar.

Estos tres personajes, Quintín, Terebeque y el Diablito fueron muy conocidos en la Cabimas de ayer en los años 60 y 80, por su manera cordial , bondadosa y amigos de todos los que los trataban, sin abandonar la atención a los numerosos clientes que asistían a sus negocios y por eso se les recuerdan con cariño.

Lcdo. Pedro Ramón Estrada
Cronista de Cabimas

Datos Históricos de Cabimas

En Cabimas la Junta de Alistamiento Militar comenzò a funcionar en el año 1836.

La Sanidad abriò sus puertas en el año 1837.

La Policia comenzò a operar en el año 1838.

La Junta Comunal se instalò en el año 1843, la cual asistìa al gobierno en el cabal cumplimiento de sus funciones.

La Junta de Notables, se conforma en 1844, formada por Pedro Toledo, Lorenzo Capitillo, Antonio Gonzàlez de Lira y Basilio Borjas, sus funciones eran registrar a los milicianos, en la calificaciòn en el uso de la tierra, preservaciòn del orden y garantizar la prosperidad de la economìa.


El primer Semanario de Cabimas y de toda la Costa Oriental del Lago fue BALANCIN, su primera publicaciòn fue el 06 de octubre de 1956 y su Fundador-Director fue el Periodista Josè Ramòn Morales. Su precio era de Bs. 0,25 ( un medio).

Sotero Pino Roqoue
El Cronista Digital.

sábado, 7 de abril de 2012

La Colonia Inglesa de Cabimas



La Colonia Inglesa fue un sector urbanìstico de avanzada en la Cabimas del auge petrolero, que estuvo ubicada en la avenida El Muelle con esquina calle Rosario del sector Punta Icotea. Era conocida como la Perla Negra de Cabimas, conformada en su mayorìa por inmigrantes trinitarios y haitianos.

La comarca estaba formada aproximadamente por cuarenta familias como Wenceslao Marc Intorks, Rufus Pascal, Clyde Bonna, Arnold Devonish, Joseph Williams, Joseph Taylor, Bell entre otros.

Las caracterìsticas de la arquitectura de la colonia inglesa constituye un arte de tipo esencialmente tropical. Su creaciòn viene a ser una de las màs grandes aportaciones de la arquitectura angloamericana en el Municipio Cabimas, ùnico en Venezuela.

El desarrollo de este estilo urbanìstico fue el fruto y esfuerzo de sus habitantes. Eran casas hermosas y llamativas a quien pasaba por el sector. La Colonia Inglesa fue una remembranza de Puerto España, Trinidad y de Nueva Orleàns, Estados Unidos; por su estilo, contumbre musicales y gastronòmicas.

Sus casas eran de madera, allì cantaban blues candencioso, se recitaban versos en inglès; se oìan las notas del ukelele y del saxo como sì estuvièramos en Bourbon Street. Se bailaba y se comia como en las Islas Inglesas del Caribe. Fueron dìas y noches inolvidables y se sentìan orgullosos de sus costumbres.

Hoy el sector presenta un estado deprimente que poco a poco a sido destruido por agentes humanos para dar paso a locales comerciales, kioscos de comidas y mercados de frutas. Los polìticos que han pasado por la municipalidad no han sabido implementar polìticas de conservaciòn de sitios emblematicos.Una vez màs se pone de manifiesto la poca importancia a la conservaciòn del patrimonio artìstico, cultural del Municipio Cabimas, para preservar la supervivencia del sector en toda su autenticidad e integridad con el propòsito de aprovecharlos racionalmente para el turismo y transmitirlo al futuro sin falsificar su contenido històrico.

Para finalizar, es un llamado al Instituto de Patrimonio Cultural para que promueva la conservaciòn artìstica, cultural de lo poco que queda en la ciudad de Cabimas.

Sotero Pino Roque

Aquellas Quemas de Judas en Cabimas

Un Judas en plena quemazòn

La quema de Judas era una tradiciòn en varios sectores de Cabimas como Ambrosio, El Amparo. Casco Central, La Rosa Vieja, Calle Cumana entre otros sectores.

Tenìa un significado simbòlico de justicia popular, pues a travès de esa acciòn la gente expresaba su repudio a la traiciòn de Judas a Cristo. Ademàs, era oportuno para expresar sus quejas y descontentos con relaciòn as acontecimientos polìticos y comportamiento de figuras pùblicas y funcionarios del Estado.

Un Judas amarrado al posta dìas antes de ser quemado Sector Ambrosio

Uno de los señores màs famosos en la realizaciòn de esta actividad fue un señor de apellido Tigrera de Ambrosio.

Cuenta Israel Roque Betancourt, era un muñeco elaborado con telas, camisas con huequitos hechos por los grillos, con palto olor a cucaracha que se compraba el Almacen Bartolo y ya no servìan, un pantalòn de popelina raida. Raul Garvett recuerda que en el año 1967 regalo unos zapatos viejos con huequito donde quedaba en deo cabezòn para hacer el Judas y lo rellenaban con cohetes. Juan Sierralta Roque en su cuaderno de anotaciones que existe desde 1940, dice que cuando gobernaba Marcos Pèrez Jimènez, quemar un Judas era un delito.

Los encargados hacìan un testamento y le dejaban a los vecinos seleccionados las pertenencias del Judas. Hoy ya no existe ni la sombra de lo que fueron Aquellas Quemas de Judas en Cabimas.

Sotero Pino Roque
El Cronista Digital.
08 de abril de 2012.

viernes, 6 de abril de 2012

Escuela Primaria Monseñor Guillermo Briñez

La historìa es verdad y nunca el hombre la puede negar. La evoluciòn històrica de la Escuela Primaria Monseñor Guillermo Briñez, nace de una instituciòn que funciona con fines eminentemente benèficos, era la Sociedad Filantròpica "Obreros del Bien" , de tantas luchas por parte de destacados docentes y actores comunitarios brillantes pasa a formar parte de la Secretaria de Educaciòn de la Gobernaciòn del Estado Zulia en el año 1971, durante el gobierno del Dr. Rafael Caldera conservando el mismo nombre "Escuela Obreros del Bien" ubicada en la calle Bolìvar, sector Casco Central y la otra sede funcionò en el Sector Tierra Negra, calle Libertad donde funcionaba la escuela de la Unión mutua Falconiana de carácter público.

PROMOCION SEXTO GRADO 1985-1986
PROFESOR CRUZ ROMERO MEDINA
FUNDADOR DE LA INSTITUCION
(FOTOGRAFIA DONADA POR PROF.ROMERO)
Se nombra como Director al distinguido ciudadano del Municipio Cabimas Maestro Cruz Romero Medina, el cual formo parte junto con destacadas personalidades del quehacer comunitario en la unificación de varias escuelas concentradas municipales y lucho férreamente a quienes de manera personal se oponían desde instituciones prominentes a que la institución educativa no se consolidara. Funcionaron por espacio de 12 años, hasta que la comunidad unida en agosto de 1975 lograron un terreno ubicado en la Urbanización Buena Vista y es cedido por el ilustre Consejo Municipal del Distrito Bolívar, del Estado Zulia, conducido por el Economista José Bauza G.

Cabe destacar que la escuela pasa a categoria de primera, el 16 de noviembre de 1975, se le asigna como epónimo el nombre de Monseñor Guillermo Briñez por ser este un destacado Sacerdote venezolano y fue Vicario General de la Cetedral de Cabimas.

Promoción sexto grado. Calle Bolivar. Foto Sotero Pino
Monseñor Briñez naciò en Maracaibo el 16 de diciembre de 1909 y muriò a los 63 años el dìa 20 de noviembre de 1972. Prosiguen las infinitas gestiones para lograr el objetivo trazado; una construcciòn moderna, siendo edificada por la Fundaciòn Edificaciones Desarrollo Escolar (F.E.D.E.), culminada, entregada y inaugurada en febrero de 1987, por el Gobernador del Estado Zulia Dr. Omar Barboza.

Actualmente sigue adscrita a la Secretarìa Regional de Educaciòn de la Gobernaciòn del Estado Zulia, ubicada en la Parroquia Carmen Herrera del Municipio Autònomo Cabimas.

HONOR A QUIEN HONOR MERECE PROFESOR CRUZ ROMERO MEDINA
(DOCENTE DIRECTOR FUNDADOR)

Sotero Pino Roque (Ex-Docente de la Instituciòn)
Cronista Digital .
Con el visto bueno del Licenciado Pedro Ramón Estrada - Cronista de Cabimas

jueves, 5 de abril de 2012

El Carnaval en Cabimas

Este mes de Carnaval es propicio para revivir “remembranzas” de la celebración de esta fiesta en la Cabimas del Siglo XX. Ahora que se ha engavetado esa “tradición”, las reminiscencias de lo que fue se archivan en las crónicas de la ciudad o en la memoria de nuestros padres y abuelos.

Cronistas, escritores, folcloristas y la gente del municipio siempre describen las celebraciones populares del Carnaval de antes. En aquel entonces en los carnavales de 1910 se jugaba con agua, harina, almidón y azulillo.

A partir de 1920 el agua era de colonia, los polvos de arroz, las serpentinas, los confines y caramelos. Se realizan juegos tradicionales como La Cucaña que era un juego difícil y resbaladizo, para escalar había que llevarse las cintas y cada una tenía un premio como carne, pan, agua, la carrera de burro, de caballo entro otros.

En la década de 1930 adquieren contornos de extraordinaria brillantes. Se realizan en la plaza con música, carroza y comparsas. La elección de la reina de carnaval se hacía a través de la venta de votos. El mejor carnaval de Cabimas fue en febrero de 1938, con la elección de la falconiana Lolita Sierra Roque.

En la década de 1940, los carnavales se siguen celebrando en diferentes sectores y barrios de Cabimas como en Tierra Negra, Corito, La Rosa Vieja, Barrio Obrero, Gasplant, Ambrosio, Amparo, Las delicias y Federación, los cuales se organizaban a través de las Juntas Promejoras. En la década de 1950 toman auge en los clubes de las empresas petroleras, en el Club San Benito, Club Régulo Reyes y la Bonita en Ambrosio.

Siempre proliferaban las mascaras, los disfraces, las negritas, los mamarrachos y el siempre pintorreado y grotesco afeminado.

En los años sesenta, según la crónica de la época se organizó el último carnaval con la participación colectiva y de gran colorido de carrozas de la Pepsi-Cola, Coca-Cola y de la empresa petrolera Creole Petroleum Corporation en 1967 en la Avenida Alberto Carnevalli. Como todos los años no faltaban los excesos en las plazas, barrios y clubes. Se decreta el fin de los carnavales populares.

Hoy, treinta y siete años después las avenidas principales de Cabimas no se engalanan para recibir las carrozas y comparsas. Ahora son los niños en los colegios y no pierden la oportunidad de lucir para su familia y sus amigos los disfraces más llamativos en el carnaval cultural promovido por la alcaldía de Cabimas.

Sotero Pino Roque

domingo, 1 de abril de 2012

Para el recuerdo, de los cabimeros de ayer, esta etiqueta fue de un agua mineral gasificada que la embotellaba un ilustre de cabimas para el año 1925: Don Jesús Borjas Pedreañez, también producía desde su casa, ubicada en la Av. Urdaneta cerca de la Plaza Bolivar, refrescos bajo la misma marca: COLA REYNA.. el señor Borjas Pedreañez, fué pionero de esta industria en la región, además que dejó sus huellas en él diseño y/o construcción de edificaciones emblemáticas de la ciudad, como una de las torres de la Catedral de Cabimas, el Cine Petrolandia y la Sede de los Obreros del Bien... y es abuelo del que publica esta nota... saludos a mis coterraneos de cabimas...


Jesús Borjas