La Rosa es uno de los núcleos urbanos originales de la ciudad de Cabimas y debe su nombre a la veneración que existía por la virgen Santa Rosa de Lima., y hasta la explotación petrolera fue un pueblo aparte de Ambrosio y Cabimas (Punta Icotea) que eran los núcleos habitados más importantes.
La Rosa es un sector muy antiguo y le dio nombre al campo petrolero que se encuentra debajo de Cabimas, el campo La Rosa. Le dio nombre también a una formación de edad Mioceno (Formación la Rosa), descubierta con pozos del campo; a un tipo de crudo (Rosa Mediano), a una unidad de explotación en el lago (Rosa Mediano) y a unos pozos en el lago (Rosa Lago, LR), etc.
En la Rosa se perforaron los primeros pozos exploratorios con los que se encontró petróleo en Cabimas, el Santa Bárbara 1 (R1), el Santa Bárbara 2(R2) descubridor del campo, los Barrosos 1 (R3) y los Barrosos 2 (R4) de fama mundial y otros como el R10 que le da nombre a una calle lo que quiere decir que el petróleo está por todas partes en la Rosa,Con el “El Reventón del Barroso 2” Venezuela y el mundo pusieron los ojos en este lugar, en Cabimas, y la noticia se expandió rápidamente. Había petróleo y como consecuencia lógica había trabajo. Empezó el movimiento de personas con y sin preparación técnica hacia Cabimas a brindar su mejor esfuerzo en la industria petrolera.
Con este movimiento de personas que vienen a trabajar en la industria, existe otro grupo que esta formado por comerciantes que vienen a prestar su servicio como dueños de restaurantes, de talleres mecánicos, de lavanderías, en el comercio, médicos particulares, etc, y también llegan las mujeres que prestan los servicios sexuales a los hombres. Las sexo servidoras.
La Rosa no escapo a esto, pues allí dentro de esa masa trabajadora estaban la mayoría de sus clientes potenciales.
En la medida que en La Rosa se iba incrementando su población y su infraestructura, pues se construyeron escuelas, viviendas, un estadio de béisbol, etc,también se fueron construyendo algunos locales adecuados para la prestación del servicio de la sexualidad, de manera que estas mujeres pudieran ejercer su oficio. Pero llego un momento, debido al crecimiento de la población, a la formación de nuevas familias, que estos negocios quedaron enclavados dentro del mismo poblado, por que la creación de nuevas viviendas poco a poco los fueron cercando, su ubicación ya formaba parte de la cotidianidad, del ir y venir de los habitantes a la iglesia, a la escuela, a Cabimas, etc, y esto no era muy conveniente por las situaciones que se presentan cuando el licor también se hace presente en el día a día.
Para los parroquianos que visitaban estos negocios eran mujeres y licor, y esta es una combinación que presenta muchos matices humanos a veces muy desagradables.
Allí permanecieron por largo tiempo hasta que ya en el año 1950 el Gobierno decidió poner fin a esta práctica en este sitio y planteo y promovió su reubicación en un sitio más alejado de este núcleo habitacional.
Los negocios más nombrados y visitados en La Rosa fueron: El Castalia de Ana Gutierrez, El Fortuna de Angela Rodríguez, el Bar Caracas de Angelina Belfort, La Hacienda, El Luna park, Mis Mascotas, Bar La Catira, el Cabaret Majestic, El Globo, etc.
Después de su reubicación quedaron las edificaciones desocupadas por un tiempo y en una de ellas, el que ocupaba el Bar La Catira, con sus modificaciones estructurales necesarias, allí empezó a funcionar el liceo Alfredo Jhan que después pasaría a su sede definitiva en la parroquia Jorge Hernández. Hoy, en ese sitio esta una empresa de radiadores (Ancri).
El nuevo sitio seleccionado para reubicar estos negocios de servicio sexual fue en la carretera J a partir de la 31, en esa época era un sitio desolado y alejado de los centros urbanos mas poblados como eran Cabimas, Ambrosio, La Rosa, los campos petroleros, etc y se le asigno el nombre de La Nueva Rosa, queriendo significar con este nombre una nueva etapa, un nuevo renacer, un nuevo lugar para el negocio de la sexualidad.
El primer negocio estaba en la esquina de la carretera J con la 31 y se llamo Mi Casita, luego seguían El Fortuna, El Caribe, La Hacienda, El América, El Magnolia, El Villa amor y otros.
Aquí, en La Nueva Rosa, estuvieron los negocios y las sexo servidoras realizando sus actividades hasta su clausura definitiva, hecho ocurrido durante el mandato del Gobernador del Estado Zulia Dr. Hilarión Cardozo (1971-1974) esto dentro del Gobierno del Dr. Rafael Caldera (1969-1974).
La Rosa Vieja no existe como tal, no existe un núcleo habitacional con ese nombre, ni un caserío ni un sector que se llame así. Ese nombre, la Rosa Vieja, comenzó a ser utilizado por la gente como elemento de comparación, de ubicación, entre lo nuevo (La Nueva Rosa) y lo viejo (La Rosa), lo que quedaba atrás, lo que dio inicio a, en el pasado.
Hoy en día se sigue utilizando muy seguido el nombre de la Rosa Vieja solo como “uso y costumbre” para nombrar a un sector que siempre se ha llamado La Rosa y que ahora esta ubicado dentro de la parroquia La Rosa.
Nelson Marcano Urribarri